
IC y VEKA Chile exploran el futuro de la construcción sostenible
Una delegación de expertos y académicos visitó la fábrica de perfiles de PVC para conocer en detalle las prácticas innovadoras, donde la calidad y la economía circular marcan el desempeño de la empresa en el sector.
El Comité de Economía Circular del Instituto de la Construcción (IC) organizó una visita a la planta de VEKA Chile en Quilicura, donde una delegación de profesionales y académicos pudo conocer de primera mano los procesos de fabricación y el compromiso de la empresa con la calidad, la sostenibilidad y la economía circular.
La visita contó con la participación de Paola Molina, Ivan Jensen, Anamaría De León, Arturo Harlem, Marcos Díaz, Mario Pardo y María José Ibaceta.
Constanza Cárdenas, especificadora técnica, y Beatriz Matamala, jefa de calidad de VEKA, guiaron la visita y compartieron la visión de la empresa. Cárdenas destacó que buscan transmitir a arquitectos, constructoras, inmobiliarias y universidades la importancia de una “sinergia completa”, que abarque desde el anteproyecto hasta la finalización de la obra.
Paola Molina, presidenta del Comité de Economía Circular del IC, destacó que “ha sido una visita muy interesante, donde hemos podido ver cómo en VEKA actúan acuciosamente produciendo perfilería con estándares internacionales y que son muy abordables para los nuevos estándares que vamos a tener con la actualización de la reglamentación térmica. Además, tienen un compromiso mayor con la sostenibilidad de reciclabilidad de los perfiles, lo cual es un paso más allá de lo que nosotros esperamos de la industria, y VEKA ya lo está haciendo”.




Liderazgo global y arraigo local
VEKA, una empresa familiar fundada en Alemania, se ha consolidado como líder mundial en la fabricación de perfiles de PVC para ventanas y puertas de alta calidad. Su llegada a Chile en 2001 marcó el inicio de su expansión en Sudamérica, estableciendo en el país una planta extrusora en 2003 que abastece a toda Latinoamérica, a excepción de Brasil.
Aunque su nombre se asocia comúnmente con ventanas, Constanza Cárdenas aclaró que VEKA se dedica exclusivamente a la fabricación de perfiles de PVC: “Nosotros no fabricamos ventanas, fabricamos los perfiles y los vendemos con los refuerzos incorporados”.
La empresa trabaja con una red de fabricantes de ventanas a los que asisten de cerca para asegurar la calidad y el cumplimiento de los estándares. Este enfoque colaborativo se extiende a arquitectos y prescriptores, a quienes se les ofrece apoyo para que sus sistemas cumplan con las normas y certificaciones del mercado, como el estándar Passivhaus.
Calidad y durabilidad: La receta secreta de VEKA
Uno de los principales diferenciadores de los perfiles de VEKA es su compuesto, llamado “Tropical Blend”, diseñado específicamente para la región, capaz de resistir los rayos UV y asegurando que el perfil blanco mantenga ese tono a lo largo de toda su vida útil, sin perder su estabilidad dimensional.
Algo que despertó el interés de los visitantes fue la vida útil de los perfiles. La empresa aseguró que, si bien la garantía es de 10 años para el perfil blanco, el material dura hasta 30 años, destacando que las ventanas suelen cambiarse por motivos estéticos, no por fallas en el material, lo que subraya la durabilidad del producto.



Innovación técnica para una construcción resiliente
La tecnología de VEKA no solo se enfoca en la durabilidad, sino también en la respuesta a los desafíos climáticos. Cárdenas explicó la importancia de que los perfiles cuenten con un refuerzo de fierro y ventilación para evitar el calentamiento del perfil. También aclararon que las perforaciones para la ventilación no comprometen la hermeticidad de la ventana, pues se realizan en la cara exterior, sin afectar la cámara interior del perfil.
La empresa cuenta con un amplio portafolio de productos, que incluye líneas europeas y americanas, cada una con sus características específicas. La línea europea Softline, por ejemplo, destaca por su espesor de 2,5 a 3 mm en la cara exterior y por contar con refuerzos cerrados, a diferencia de otras marcas. Los perfiles europeos también vienen con burletes de EPDM soldable que garantizan la hermeticidad de la ventana.



Un compromiso real con la economía circular
VEKA tiene un compromiso de larga data con el medio ambiente. La empresa recicla sus propios residuos y los de ventanas antiguas que van a ser reemplazadas. En su planta de Quilicura, todo el despunte de perfiles blancos se reutiliza directamente en la producción. En tanto, los perfiles foliados se acumulan y se envían a la planta de reciclaje de VEKA en Francia, que cuenta con la tecnología para reutilizarlos.
En este sentido, la empresa está alineada con la creciente preocupación por la economía circular en el sector de la construcción. El subcomité del IC que aborda esta temática busca promover prácticas más sostenibles desde la producción hasta el diseño, y la visita a VEKA demostró cómo una empresa puede integrar el reciclaje en su cadena de valor. Este compromiso se extiende al uso responsable de los recursos, ya que en el proceso de extrusión, VEKA utiliza circuitos cerrados de agua, perdiendo solo por evaporación.
La visita a la planta de VEKA no solo fue una oportunidad para entender los procesos técnicos detrás de la fabricación de perfiles, sino también para reflexionar sobre la importancia de la colaboración, la innovación y el compromiso con el medioambiente en un sector que enfrenta grandes desafíos. La experiencia demostró cómo el sector privado y sus aliados pueden contribuir al desarrollo sostenible de una industria más robusta y resiliente.










